Separando la Fantasía de la Ciencia Ficción
Fantasía (Star Wars) vs Ciencia Ficción (Star Trek)
Por ahí en el Facebook, en una publicación sobre la película Interestelar, me crucé con una señora de 80 años que no entendía ciertas cosas.
Y la gente… los comentarios y respuestas… dejaban mucho que desear.
Le hablaban de teorías, dimensiones y muchas cosas más que, algunas no solo estaban mal, sino que no se ponían en el lugar de la señora para que una persona mayor, común y corriente, la entienda. Yo cuando vi eso, pues me acordé de mi vieja (mi madre), el tipo de persona que es, la atención que le presta o no, a las cosas.
Y algo que siempre me ha molestado de mucha gente que intenta explicar alguna información, pues parecen no conocer de simple empatía, de ponerse en el lugar del otro.
Sin ir más lejos, odio muchos sistemas de cobro y pago, como los bancos, que supuestamente están dirigidos a la gente mayor, a jubilados, y a veces ni yo los entiendo que se de computación. (Y es que sospecho que esas páginas están programadas por sobrinos, nietos o cuñados fracasados de algún funcionario corrupto, al que le dieron el puesto por nepotismo).
Pero esto es más que lidiar con la pésima burocracia.
De pronto algo me hizo click y recórcholis!!* Me doy cuenta de que mucha gente repite y aplica los mismos errores a los géneros del título.
*(Aunque acá en Marte, no tenemos censura de ningún tipo, preferimos no caer en vulgaridades)
Así que a modo de... informe cultural parte 2, aclaremos algunas cosas.
La ciencia ficción es un género narrativo (es decir, atado a todo aquello que tenga una narración), cuyo nombre lo dice todo: es ficción con base en la ciencia.
¿Y qué es la ficción? ¡Ajá! Aunque parezca simple, muchos se olvidan que la ficción no está atada a lo futurista.
Ficción es todo aquello que sea ficticio.
Por ejemplo, la película de Historia de un Matrimonio, con Adam Driver y Scarlett Johansson, es una historia de ficción porque sus personajes están inventados, fueron creados para la obra.
Y aunque el escritor pudo haber usado sus experiencias personales para algunos personajes, estos no son reales, no están basados en una historia real, que ahí ya hablamos de una biografía.
La miniserie de Chernobyl, por ejemplo, no es ficción porque está basada en hechos reales, aunque tenga un personaje ficticio representando a varias personas reales.
Esto nos lleva a que la ciencia ficción, en sí, ni siquiera está atada a parámetros futuristas. Puede tener lugar en la sociedad del presente, o incluso podría ambientarse en el pasado, siempre y cuando cumpla la idea de respetar los parámetros científicos que rigen nuestro mundo.
Fantasía.
Otro gran error es creer que la fantasía está atada a la magia, espadas y dragones.
No, eso es en todo caso fantasía medieval.
La fantasía viene de fantástico, y el género se refiere a todo lo que sea, justamente, fantástico, único, maravilloso.
O que tenga elementos fantásticos que no respeten la ciencia.
Y acá viene el golpe: Star Wars no es una serie de ciencia ficción, es de fantasía. Star Trek sí es ciencia ficción, o al menos las Star Trek antes de que el… cabeza de chorlito de JJ Abrams las manchara.
¿Por qué Star Wars es fantasía?
Por un lado, muchos de los elementos de la obra no siguen patrones científicos… parecen científicos, pero no lo son.
Por el otro, tienen el poder de la Fuerza. Un tipo de magia que, aunque se le quiera dar una explicación creíble, esta no es científica, no sigue patrones de la ciencia que define nuestro mundo.
Y ojo que esto no es algo malo. Star Wars no pierde valor porque sea una fantasía espacial.
Pierde valor porque tiene a la pelandusca de Kathleen Kennedy a cargo, y está metido Disney atrás… pero no por ser una fantasía.
Por cierto, no viene exactamente a cuento del tema, pero ya que estoy, lo remarco: Star Wars no es una fantasía espacial futurista. No es futurista, porque transcurre “hace mucho, mucho tiempo atrás, en una galaxia muy, muy lejana”.
Ya que estamos en esto, Interestelar… Nolan raya la fantasía, porque a pesar de que varios físicos teóricos insisten en que la película tuvo mucho apoyo científico al ser escrita… está llena de agujeros de guion por todas partes. Pero no solo eso.
En la trama, ultra resumida, Joseph Cooper, un granjero viudo ex ingeniero, ex piloto, ex astronauta, ex integrante de Menudo, y ex stripper (el tipo sabe hacer de todo y estuvo en todo, casualmente), es enviado al espacio a buscar un nuevo lugar para que la humanidad migre.
En la órbita de Saturno se encuentran con un conveniente agujero de gusano por el cual caben varias naves (¿?), que los lleva hasta un sistema planetario alrededor de un agujero negro (¿WTF??).
Primero que nada, los agujeros de gusano, según la ciencia, si es que existen, serían tan diminutos que no podrías ni meter una mota de polvo por ellos.
Estamos hablando de tamaños subatómicos, tan microscópicos que son más chicos que un protón, y que se colapsan en menos de lo que tarda un pensamiento en formarse.
Y para mantener uno abierto y estable, la teoría dice que haría falta “materia exótica”, una sustancia que ni siquiera sabemos si es posible, y que viola un montón de reglas físicas conocidas.
Así que la idea de que varias naves espaciales atraviesan uno como si fuera un subte de Buenos Aires… pues eso es directamente fantasía con aroma a ciencia.
Segundo, ¿de verdad alguien pensó que puede haber planetas orbitando alegremente alrededor de un agujero negro? Si una de estas bestias cósmicas se traga la luz, que es lo más veloz del universo, claramente va a tragarse todo lo demás mucho antes. Nada que se acerque escapa, salvo aquello tan lejano que ni siquiera percibe su presencia.
Y encima, ¿habitables? ¿Dónde sacan el calor, la luz, la energía? Un agujero negro no es un sol. Es una tumba cósmica.
La cosa es que al final de la película, Cooper debe regresar al planeta Tierra por magia del guion, y en tiempo récord. Pero un físico teórico le explicó a Nolan que esto era imposible, porque en nuestro universo, nuestra dimensión, nada viaja más rápido que la luz, e incluso esta es tragada por el agujero negro, que de ahí su nombre común.
Así que la solución argumental y yo diría atajo que un físico le dio a Nolan, es el de las dimensiones:
Nosotros habitamos la tercera dimensión, ¿no? Bueno, supuestamente existe la primera dimensión, la segunda dimensión, la cuarta dimensión, la quinta, la sexta, etc. etc.… así que al final de la película, Cooper se mete al agujero negro, en donde viaja a la cuarta dimensión, en donde el tiempo y el espacio funcionan de forma diferente, y así tenemos el cierre en que Cooper se comunica con su hija o algo así.
¿Es ciencia ficción? Sí. ¿Raya la fantasía? Sí, porque estamos hablando de dimensiones. No hay nada comprobado, son solo teorías… no, son en realidad hipótesis, sugerencias, fantasía de los físicos teóricos y matemáticos.
¿Y por qué? Porque estamos hablando de dimensiones, de planos de existencia diferentes al nuestro, que por lo tanto, no están atados a nuestra ciencia, ni mucho menos a las matemáticas ni a nada conocido.
De hecho, la física cuántica, la cual es un área muy compleja, es la que en todo caso intenta demostrar que existe un plano en donde las cosas no son como nosotros las concebimos normalmente.
No, no hablo de mundos paralelos o realidades alternativas.
Por poner un ejemplo rápido, nosotros estamos acostumbrados a que un mismo objeto no puede estar en dos lugares al mismo tiempo. Que el fuego no se congela, y muchas cosas más por el estilo.
La física cuántica va por ese lado y es tan, pero tan abstracta, que no es raro que las mentes más “ilustradas” al respecto no entiendan un corno.
Pero bueno, ahí ya me estaría metiendo en la metafísica, y lo paranormal.
Por ahora, quedémonos con que la ciencia ficción no es lo mismo que la fantasía, y que Nolan intentó crear una burda copia de una trama que 2001: Odisea del Espacio contó mucho mejor hace más de 50 años atrás.
Si quieren me pueden preguntar en los comentarios qué obras son ciencia ficción y cuáles fantasía. Las analizamos y obtenemos una respuesta lo más acertada posible.
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